Una nueva prensa musical
Con un título prestado de una canción de Los Planetas y un disco de The Clash de fondo, el que escribe este weblog se dispone a reflexionar en voz alta (o sea, en la blogosfera) sobre la situación del periodismo cultural en general, y en particular el referido a la prensa musical. Aviso que este post no es apto para fans de David Bisbal o Melendi, a los que he de soportar diariamente debido a la coexistencia pacífica con una adolescente, y que rivalizan en ondas con mis Paul Weller, Lou Reed o The Who.
No me apetece realizar un análisis demasiado somero del status quo en el periodismo musical español, más que nada porque no hace falta. Una visita al kiosko te permite ver cómo, entre la ingente variedad de revistas del colorín, motor y tunning y otras aficiones pasajeras, puedes descubrir un par, a lo sumo media docena, de revistas dedicadas íntegramente al mundo de la música. Un aspecto más que indica que la música en este país es considerada cultura de segunda Pero bueno, vayamos al grano.
Un vistazo a la variedad de revistas musicales españolas decepciona: tenemos revistas demasiado minoritarias (Rock Sound), demasiado mainstream (Rolling Stone, a pesar de lo que pueda parecer y de lo que quiera aparentar), copias de formatos de la tv (MTV, Música 1), algún panfleto dedicado a estilos musicales diversos y otras publicaciones a las que prefiero no referirme. Posiblemente salavría a Mondosonoro, aunque muchas veces se centra en contenidos demasiado minoritarios. En fin, es lo que tenemos.
Pero la prensa musical decepciona, además, en lo relativo a programas de radio y televisión. Salvo la honrosa Radio 3 y alguna emisora independiente o alternativa (incluso las universitarias), el desprecio por la música es increíble. Sólo así se explica que Punt 2 programe los conciertos del FIB a las 7:30 de las mañanas de sábados y domingos o que El Canto del Loco sea el grupo que más salga en los medios.
Ni Tentaciones por su peculiar manera de tratar las cosas ni La Cartelera-NEO por su cada vez más reducido espacio se pueden considerar publicaciones con esa vocación, aunque cumplen un papel de sustitución que, en el caso de existir en España publicaciones de calidad como Vox, Mojo, NME Originals o Uncut, no realizarían básicamente porque no existirían. De momento, entre ellas y las webs (Muzikalia, SDR, Supernova...) vamos tirando. Pero el hecho de que tenga que andar varios kilómetros y gastarme al menos 7 euros en una revista británica cada mes sin que haya una buena alternativa en España me parece sangrante. Que aparezca una nueva prensa musical, por favor.
dimarts, d’octubre 05, 2004
dijous, de setembre 23, 2004
Un profesor de la vieja escuela
Hoy, como cada mañana, me he dispuesto a leer el periódico. No había hecho más que abrirlo cuando he podido leer, perplejo, las palabras que abrieron la primera clase magistral del expresidente del gobierno español en su debut en la University of Georgetown.
«El problema de España con Al Qaida empezó en el siglo VIII, cuando fue invadida por los moros»
En fin. Visto lo visto, se me plantean una serie de preguntas:
1- ¿Conoce Josemari la historia española en profundidad o se ha leído uno de sus libros juveniles para preparar deprisa y corriendo la clase?
2- ¿Quieren decir sus declaraciones que personajes históricos como Maimónedes o Abderramán III fueron los predecesores de Osama Bin Laden?
3 -¿Quería Josemari encabezar una nueva cruzada contra los "infieles" cuando entró en la guerra? ¿Creía que Bush era Federico II y Blair, Ricardo Corazón de León?¿O es que se cree el Cid, mercenario castellano mitificado por un poema?
4 -¿Se implantará en EEUU el nacionalcatolicismo franquista español en el sistema educativo? ¿Volverán a educarse los chiquillos con las enciclopedias Álvarez?
5- ¿Se olvida Josemari de que en muchas ocasiones la Reconquista como tal se debió a razones económicas y no político-religiosas? ¿Se olvida de que los musulmanes entraron en España con el beneplácito de algunos nobles visigodos y que en muchos lugares tras la conquista militar se conservó una independencia formal (¿Teodomiro le suena de algo?)?
6- ¿Sabe Josemari que en el Al-Andalus de la Alta Edad Media florecieron la cultura y el arte, la economía era boyante, la tolerancia era el pan nuestro de cada día y se alcanzaron unos niveles de vida que en la Europa cristiana medieval y feudal no se verían en cientos de años?
7- ¿Tan pocos argumentos tiene Josemari para apoyar su intervención en la guerra que tiene que retrotraerse hasta épocas casi antediluvianas?
Conocer el pasado es saber las claves del presente. Cómprate una buena enciclopedia y deja de escarbar en los papeles del pasado, amigo.
dimarts, de setembre 21, 2004
Las verdades absolutas del señor ACS
¡Bueno, bueno, hay que ver cómo está el patio! Tres jornadas de liga y una de Champions League y el amigo Camacho, defensa leñero en su época como futbolista y mediocre entrenador siempre rodeado de medios afines en sus ulteriores etapas, ya ha tirado la toalla. El Real Madrid, ese equipo que se iba a comer al mundo en julio, que tenía a los 6 mejores jugadores de la galaxia y al entrenador con más innombrables para manejarlos y con más carisma de España (entorno mediático dixit), se balancea ahora como el Titanic en sus últimas horas. Y digo lo de Titanic más que nada por toda la gente guapa que se va a salvar mientras muchos (los que en realidad sufren en todo este tema, que son los aficionados) se van a pique.
Camacho, ¿sobrevalorado?. Por supuesto. Pero no es el único que se lleva las culpas. La gran parte de estas culpas se la lleva una panda de jugadores/mercenarios que no se dejan todo el en campo y sí en las fiestas con señoritas de compañía, un entorno mediático que ahora juega a esconder la cabeza y un presidente que quiere hacer negocio y dar más pelotazos a costa de los sufridores. Y estos tres culpables tienen una enorme similitud, sobre todo centrada en un factor que yo creo fundamental: dan la espalda a la realidad, a lo que pasa en la calle.
No suelo oir demasiado El Larguero, de la Cadena Ser, porque a esas horas prefiero escuchar emisoras donde me hablen de los equipos que me interesan, como el Valencia o el Levante, pero anoche, sabiendo que el señor ACS iba a hacer una aparición estelar en el programa de José Ramón de la Morena, sintonicé las ondas de la emisora con más oyentes de España y me propuse seguir su elocución atentamente.
Perplejidad. Para el señor ACS no había pasado nada. El Real Madrid no está en medio de una enorme crisis de juego, los jugadores responden perfectamente en el campo y ante los aficionados y los que gritaban a los jugadores recriminándoles su actitud eran dos personas (contados por el máximo representante del madridismo). El resto son flores. La afición merengue no está más que quemada. Eso son invenciones de la prensa y pim pam pum. Y quien diga lo contrario miente, o se lo inventa, o quiere volver a las elecciones de la presidencia en las que ACS arrolló. Verbigracia. El señor ACS contra el mundo. Hasta contra los que le auparon a la presidencia y los que le bailaron el agua.
El señor ACS se fue del programa cabreado. Y encerrado en sí mismo, dispuesto a creer algo que sólo él piensa. En ese aspecto me recordó mucho a un tiempo no lejano en que otro presidente, que solía hablar con acento estadounidense para hacerse el gracioso ante la prensa, y al que le gustaban mucho los juguetitos militares y que nadie le llevase la contra, negó, negó y mil veces negó lo obvio, alentando a que se investigara en otros flancos. Esa manipulación digna de rey borbón absolutista del siglo XVIII, le costó muy cara y dejó a sus compañeros sin trabajo.
No me extraña el paralelismo cuando se sabe que el señor ACS es de la misma extracción ideológica y social que el antes mentado caballero. Que fue concejal de Madrid, que fracasó en una aventura centrista cuando AP sufría el síndrome del techo electoral, que consiguió ser presidente del Real Madrid porque su contrincante era mucho peor que él y se jugaba el dinero en timbas, que dio el pelotazo de su vida vendiendo a la Comunidad de Madrid los terrenos de entrenamiento del equipo y que ahora, en medio de una galopante crisis, sigue sacando pecho y diciendo que no sabe nada y que todo va bien. "El Madrid va bien" se parece demasiado a "España va bien".
En fin, quien se crea lo que dice, que se lo crea. Lo que no puede ser es que cuando los aficionados (ellos son, en el Real Madrid, los dueños del club) te pitan, digas que son 3 o 4 y que no representan a todos, sino que son agitadores de la prensa. Y no se puede tener tanto morro como para vender eso como una verdad absoluta.
No creo en las verdades absolutas. ¿Y usted?
divendres, de setembre 17, 2004
Bye bye, Johnny
Otro nombre más se ha unido a la lista de muertes ilustres de la música contemporánea. El guitarrista de los Ramones, John Cummings (más conocido como Johnny Ramone), ha fallecido tras una larga enfermedad que le ha llevado a luchar 5 años contra un cáncer de próstata. Con él se va uno de los que propiciaron la revolución en los esquemas y planteamientos de la música moderna, hastiada del rock progresivo y ávida de nuevas sensaciones, y se va relativamente pocos meses después de que, primero Joey y luego Dee Dee, los otros dos fundadores de los Ramones, dejaran el planeta rock.
Johnny nunca será recordado por ser un gran guitarrista, en la línea de los Clapton o Hendrix. Tampoco se le recordará por haber sido la voz de los Ramones (no cantaba ni los coros) ni el tipo más carismático dentro del grupo. Joey, con su peculiar figura desgarbada, siempre se granjeó más simpatías que el callado guitarrista de pelo lacio y mirada amenazadora. Johnny era un personaje prototípico de los Estados Unidos serie-B: había estudiado en una academia militar, odiaba a los vietnamitas, le entusiasmaban las biografías de estrellas de cine y las películas de terror como La Matanza de Texas. Además, fue un vehemente seguidor y un apoyo de los republicanos americanos. Un hombre muy influenciado por el pensamiento ultraconservador u.s.a que nunca ocultó su amistad con Ronald Reagan y que llegó a hacer campaña por el partido que ahora comanda Bush. Está claro que todos tenemos un lado oscuro.
Johnny saltó a la fama gracias al estallido de la música en la calle en 1974. Influenciado por los Beatles, el surf y el bubblegum pop, Johhny coprodujo y escribió una ingente cantidad de éxitos que luego interpretaba casi sin descanso, sin solos de guitarra y con una rapidez inusitada para la época. Iggy Pop y los New York Dolls habían sido los precursores, pero los Ramones fueron la explosión para que todo cambiara. Bajo su manto protector nacieron los Clash o los Sex Pistols, y toda una estética y un sinfín de bandas que hicieron de su capa un sayo y adoptaron el lema del "súbete y hazlo" sin apenas saber tocar sus instrumentos.
En fin. Se murió Johnny. Supongo que ahora la industria discográfica, que tantas pegas le puso, se estará relamiendo pensando en el recopilatorio que podrá sacar dentro de poco. ¿Necrofilia y dinero? En casos como el de Johnny, son claros sinónimos.
dimecres, de setembre 15, 2004
De la Universitat y sus cosetes
Este año empiezo 4º de Periodismo en la Universitat de València. Sí, es cierto, es una carrera que a simple vista parece muy buena, elitista y todo lo que se quiera añadir. Nota alta de ingreso, plazas reducidas, clases experimentales, buen material... pero un desastre organizativo que tanto mis compañeros como yo sufrimos sobre todo cada año por estas fechas (aunque el desastre se suele extender a toda la duración del curso académico, que quede bien claro).
Ayer era mi turno para formalizar la matrícula. Primera sorpresa. Llego a la facultad y observo, perplejo, cómo una asignatura que había decidido cursar porque se centraba semanalmente en la actualidad había desaparecido del mapa y se había transformado en una de periodismo cinematográfico (bueno, no está mal, siempre me ha gustado Tarantino, o sea,que la cojo y no me complico más).
Segunda sorpresa. Tenía pensado hacer mis troncales y obligatorias y escoger asignaturas de la carrera hermana de Comunicación Audiovisual como libre elección para que por lo menos me sirvieran de algo (la experiencia de cursos anteriores fue casi traumática). Oigo rumores de que no, de que no puede ser, pero yo, con más moral que el Alcoyano, busco y rebusco. ¡Falso! Hay algunas que se pueden coger, pero no todas. Y la que yo quiero no está entre ellas. Levanto el brazo para solicitar ayuda al personal de la sala. Media hora después, una mujer se acerca.
-Què vols?
-Mira, és què volia matricular-me en una assignatura de Comunicació però no em deixa...
-Eres de Periodisme?
-Si. Me la volia agafar de lliur...
-Ah, no, no. Un estudiant de Periodisme no pot fer mai de la vida (enfatizando) una assignatura de Comunicació. (TAJANTE)
Y aquí acaba mi aventura en cuanto a la elección de asignatura. O sea, que puedo cogerme una asignatura de libre elección que no tenga que ver nada con mi carrera como per ejemplo "Psicología de la Pareja" o "Elementos latinos en la química" y no puedo cogerme una de locución y producción de programas de radio. Bieeeeeeeen. Braaaaaavo. Qué buenos sois. Gracias, Universitat. A ver dónde se ha visto esto. Si lo sé, me voy a Barcelona.
P.S.
dijous, d’agost 26, 2004
Los "amigos" que siempre ganan
diumenge, d’agost 22, 2004
Hablemos del FIB
No tenía pensado hacerlo, porque es un tema que pienso que está más que visto y del que se ha hablado muchísimo, pero el haber leído un tema en un blog bastante recomendable, el de Ademarista, me ha motivado para escribir una especie de resumen de lo que ha sido el FIB de este año, el del décimo aniversario, el que iba a congregar a Morrissey por fin ante su público más fiel, el que tenía como suplentes de lujo a Arthur Lee, Kraftwerk, los Pet Shop Boys o Brian Wilson. El que, en resumen, iba a ser, por nombres, de los mejores de la historia.
Quiero decir que hablo desde un conocimiento sesgado de las cosas que allí pasaron, porque ciertos personajillos que conforman la organización no desearon acreditar este año (aunque sí los cuatro anteriores) al medio de comunicación al que pertenezco. De todas formas, el enchufismo es en el festival el pan nuestro de cada día, y si no puedes ir a hacer tus reportajes o entrevistas, o a ver a los grupos que te gustan, no pasa nada. Eres de un medio pequeño, y pasan por delante de ti todos los "amigos de" que te puedas imaginar. He seguido los conciertos como he podido, entre Radio 3, magnífica como siempre pero que se ha quedado corta para muchos como yo, y Punt 2, que en los últimos días ha estado ofreciendo algunos de los mejores conciertos del festival. Aunque claro, no es lo mismo.
Después de lo que vi y lo que oí, la corona se la repartirían 3 grupos. El primero es mr Lou Reed, que se resarció de su mala actuación en Santiago, y ofreció un conciertazo con temas como Satellite of Love, Jesus, Venus in Furs (magnífica), Perfect Day, Sweet Jane y un bis con Walk on the wild side. Para mi gusto, faltó White Light/White Heat, pero no importa. Un 9 alto para uno de los impulsores de la escena musical alternativa.
Brian Wilson podría llevarse la segunda mención. Aunque no he podido ver gran cosa de su concierto, parece ser que se le vio nuevo, impredecible, genial, con una gran banda, recuperando temas de los Beach Boys y convirtiéndose en el gran músico que siempre ha parecido ser.
Y tres. Scissor Sisters. No tenía ni idea de quiénes eran antes del FIB, pero que nadie dude de que me voy a hacer con su disco. Directo demoledor y brutal, derroche de cachondeo y de actitud y muchísima diversión. Si son un hype, será porque quieren, ya que pueden llegar a consagrarse.
Pasamos a los que han estado bien o bastante bien. En líneas generales, quedé bastante satisfecho con Cooper, los Charlatans, Teenage Fanclub, Belle and Sebastian y los Dandy Warhols. Como no he tenido la ocasión de oir a los Chemical Brothers, Primal Scream, los Pet Shop Boys o los Planetas, no digo nada. Ya los veré, y ya opinaré.
Y ahora, las decepciones. Punto por punto:
1- La espantada de Morrissey, que dejó en ropa interior a la organización y que demostró, una vez más, que al artista le importan un bledo los contratos firmados. Si no quiere actuar, no actúa. Y punto.
2- La organización. No se puede dejar escapar a Paul Weller y a Morrissey cuando ya estaba confirmado que iban a ser cabezas de cartel. No se puede poner horarios parejos para 2 mismos grupos importantes. No se puede vender lo que se vende en el recinto a precios por las nubes. Y no se puede tener la cara dura de que, a pesar de llamarlos todos los días varias veces para comprobar el asunto de las acreditaciones, se hagan los suecos y no cojan el teléfono (después de haber contestado el primer día y prometer responder)
3- Arthur Lee, el de Love. Recibió la noticia de la muerte de su amigo Richard James (el de Superfreak) poco antes de su concierto. Deprimido, se aferró a la botella. Destrozó en su directo uno de los mejores discos de la historia, Forever Changes, y se marchó entre los abucheos del personal.
4- La única presencia valenciana era Polar, a pesar del dinero que las instituciones han puesto en el FIB este año. ¿Qué pasa con otros grupos de la tierra? ¿No existen? ¿O es que las presencias en el festival sólo son para los colegas de los jefes?
Podría decir mucho más, pero no importa. El FIB, posiblemente el mejor festival del sur de Europa, tiene bastantes cosas que mejorar si quiere ponerse a la altura de los grandes del norte. Tomen nota, Moranes. El año que viene hace falta dejarse de grupos fetiche y apostar por nombres que nunca han estado: Ben Harper, REM, David Bowie y otros. Y si no vienen es porque no se hace todo lo que se puede.